AGENTES GENERADORES DE IDEAS PARA EL CAMBIO

 

"Todos los hombres nacen iguales, pero es la última vez que lo son." (Abraham Lincoln)

Esta frase escrita por el decimosexto Presidente de los Estados Unidos de América sigue vigente hoy en día a pesar de haber pasado más de 150 años desde que se escribiera.

A pesar de los esfuerzos realizados legislativamente y a nivel educativo para lograr una igualdad real y efectiva, en ausencia de discriminación y dentro del respeto al diferente, a día de hoy podemos decir que siguen existiendo multitud de situaciones en las que podemos ver que se discrimina por diferentes motivos: raza, sexo, religión, edad, opinión política, nivel económico o educativo, etc. Todos conocemos de primera mano algún caso de trato discriminatorio, cuando no vejatorio, contra alguna persona o contra algún colectivo. 

Como funcionarios de las distintas Administraciones Públicas, tenemos una responsabilidad respecto a nuestros compañeros/as de trabajo, y respecto a los administrados, con quienes debemos guardar escrupulosamente el máximo respeto de sus derechos y prestarles en la medida de nuestras posibilidades y responsabilidades el trato adecuado y la asistencia y ayuda necesarios.

A este respecto, no podemos olvidar que el Real Decreto Legislativo 5/2015, de 30 de octubre, por el que se aprueba el Texto Refundido de la Ley del Estatuto Básico del Empleado Público, regula en su Capítulo VI, entre los deberes de los empleados públicos, un Código de Conducta. Art. 53.4: "Su conducta se basará en el respeto de los derechos fundamentales y libertades públicas, evitando toda actuación que pueda producir discriminación alguna por razón de nacimiento, origen racial o étnico, género, sexo, orientación sexual, religión o convicciones, opinión, discapacidad, edad o cualquier otra condición o circunstancia personal o social."

Por otro lado, en nuestro ámbito más próximo, ya sea familiar, social, de amigos, etc., creo que está en  nuestra mano el poner nuestro granito de arena para tratar de concienciar a los que tenemos más cerca en la idea de que el respeto al otro, sea o no igual o diferente a nosotros, debe ser la base de una educación y un sistema social que refleje en el día a día la igualdad de oportunidades para todos y la abolición de todo tipo de trato discriminatorio. 

Queda mucho camino por andar, pero pienso que se están dando pasos importantes para que en un futuro palabras como edadismo, xenofobia, aporofobia, homofobia, heterosexismo, capacitismo, racismo, etc. solamente sean entradas en el diccionario y no situaciones que vemos reflejadas a diario en los noticieros.